China y Australia: el episodio que vuelve a tensionar la relación entre ambos países


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El adiós de Australia a las Nuevas Rutas de la Seda

Fue a finales de abril cuando la ministra australiana de Asuntos Exteriores, Marise Payne, anunció que revocaría los acuerdos que mantenía el Estado de Victoria con el gobierno de China, y que habían sido firmados entre 2018 y 2019.

Dichos acuerdos se enmarcan en el proyecto conocido como “Nuevas Rutas de la Seda”, el cual corresponde a una “ambiciosa red china de infraestructuras repartidas por los cinco continentes que puede costar hasta un billón de dólares”, según consigna El País.

Este plan estratégico cuenta con la adhesión de más de cien países en todo el mundo y abarca áreas comerciales, financieras, de seguridad y culturales.

“Para China, los beneficios del plan son claros: ampliar vías hacia el oeste le permite desarrollar sus regiones occidentales, más empobrecidas; estimula sus sectores industriales en momentos en los que su economía entra en una etapa de menor crecimiento; abre mercados para sus productos; facilita que otros países adopten sus estándares tecnológicos, por ejemplo en telefonía 5G; y, en general, expande su presencia e influencia internacional”, explica un artículo de El País en 2018.

¿La razón? “Contrario a la política exterior australiana”, señala un artículo de Radio Francia Internacional y explica que “este poder de veto fue posible el pasado mes de diciembre tras la aprobación de una Ley de Relaciones Exteriores. Según la ley, el gobierno federal puede bloquear cualquier acuerdo entre los estados, los gobiernos locales, las universidades australianas y cualquier gobierno extranjero si considera que el acuerdo es contrario al interés nacional”.

Evidentemente, esta medida no gustó nada a Pekín. De acuerdo con un comunicado de la embajada china en Australia, esta decisión “muestra que el gobierno australiano carece de sinceridad sobre la mejora de las relaciones”. Asimismo, China consideró que esta acción fue un “grave daño” para relaciones bilaterales entre ambos países.

La reacción de China

Evidentemente China no se iba a quedar en la mera queja contra esta medida y a principios de mayo, la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China anunció la suspensión de forma indefinida de las conversaciones comerciales con Australia, en el marco del Diálogo Económico Estratégico China-Australia.

El comunicado de la NDRC (por sus siglas en inglés), estableció que “recientemente, algunas autoridades del Gobierno de la mancomunidad australiana lanzaron una serie de medidas para interrumpir los intercambios normales y la cooperación entre China y Australia debido a una mentalidad de Guerra Fría y a la discriminación ideológica”, según consiga Reuters.  

Sin embargo, el medio afirma que la comisión no especificó algo respecto a las medidas que motivaron esta acción.

Australia y su réplica

A Australia no le cayó bien la abrupta decisión de China. Fue el ministro de Comercio australiano, Dan Tehan, quien respondió a esto y afirmó que la decisión del país asiático era “decepcionante”, pues “el diálogo económico es un foro importante para que Australia y China trabajen en cuestiones relevantes para nuestra asociación económica”, según Reuters.

Sin embargo, afirmó que continuarán abiertos a mantener el diálogo y participar a nivel ministerial.

Uno de los principales motivos para mantener los canales de comunicación y diálogo es que el hierro, figura como el mayor producto que Australia exporta actualmente a China. Durante los últimos 12 meses, “Australia exportó a China bienes por valor de 149.000 millones de dólares australianos (115.000 millones de dólares)”, agrega Reuters.

En paralelo, Estados Unidos afirmó que ayudará a Australia en el caso que sea forzada a enfrentar una coerción económica por parte de China.

Durante la visita a EE.UU de la ministra de Relaciones Exteriores australiana, Marise Payne, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, afirmó que el país norteamericano “no dejará a Australia sola en el campo, o tal vez debería decir sola en el terreno, ante la coerción económica de China”, según consigna la empresa de radiodifusión pública de Australia, Special Broadcasting Service.

Asimismo, Blinken sostuvo que “le hemos dejado claro (a China) cómo este tipo de acciones dirigidas a nuestros socios y aliados más cercanos obstaculizarán nuestros esfuerzos para mejorar nuestra propia relación con China”.

China y Australia: Consecuencias inmediatas tras el anuncio

Más allá de la reacción entre ambos países, existió una repercusión económica. El dólar australiano cayó bruscamente y llegó a marcar 0,7701 por dólar estadounidense. 

Seguidilla de conflictos entre ambos países

China y Australia han tenido una difícil relación desde hace varios años con diversas discrepancias.

La tensión entre ambos países ha tenido algunos episodios, por ejemplo, la petición que realizó el año pasado el primer ministro australiano, Scott Morrison, para que se investigara internacionalmente los orígenes de la pandemia por el COVID-19.

Pero no es solo eso, anteriormente ya se habían dejado entrever problemas por diferencias geopolíticas en el mar de China Meridional.

Esto se relaciona con el aumento de la presencia china en las Islas del Pacífico y la prohibición que tuvo la empresa tecnológica china Huawei para participar en el sistema 5G australiano.

¿Qué dicen los expertos?

Los ojos están puestos en el impacto comercial que tendría el hierro en medio de estas tensiones bilaterales.

El director gerente de Navigate Commodities Ptd Ltd, Atilla Widnell, dijo a Reuters que “creemos que la relación comercial del mineral de hierro entre Australia y China se mantendrá al margen de las actuales tensiones políticas entre ambas naciones”.